Perdurables y genuinas.
En una sociedad que demanda cambios continuos para ver colmadas novedosas expectativas, en un mundo que funciona a velocidad de vértigo, y que consume compulsivamente, las compañías de bebidas se afanan cada año en ofertar un vastísimo y diverso catálogo de nuevos productos. Parece lógico, y así ha venido sucediendo desde siempre, que a la gente nos guste lo innovador, lo revolucionario, lo vanguardista y, en fin, lo que esté de moda.
Muy respetable, si bien, permitidnos apostar por lo imperecedero, por aquello que podemos calificar de perpetuo o inagotable frente a lo efímero.
El quid de la cuestión, la razón de ser, o el motivo por el que determinadas bebidas, año tras año, copen los puestos de cabeza en ventas, radica bajo nuestro humilde punto de vista, en su calidad. No nos cabe la menor duda.
Tenemos el atrevimiento de sugerir, siendo muy conscientes de las tendencias de demanda creciente de bebidas bajas o sin alcohol, que, con responsabilidad hagamos una apuesta selectiva por la grandeza de Ron Barceló y la ginebra Bombay Sapphiere.
A los que, a partir de este mes de agosto, tomáis unas merecidas vacaciones, desearos con nuestro mejor ánimo, disfrute junto a nuestras playas y restaurantes haciendo acopio de energía con el indudable encanto del Distrito marítimo del Grao de Castelló.
Degustadlo con sosiego.