La sepia y los mejillones “tienen nombre” en el Grao.
Los bares no son meros lugares en los que saciar nuestro apetito y saciar nuestra sed. En realidad, son un inequívoco punto de encuentro, de celebración y espacio en el que se socializa.
Buena muestra de lo que afirmamos la encontramos en el espacio entrañable y con inmenso arraigo en el Grao de Castelló, en concreto, en el establecimiento regentado por Dña. Montse Terrado, acompañada por sus hijos Vicente y Carlos.
No sería concebible hablar del tradicional almuerzo en esta zona sin pensar en este local que sigue atrayendo a la gente que puebla el Distrito marítimo y que continúa granjeándose el cariño y las alabanzas de sus clientes que son fieles a mejillones y a una sepia aderezada con “La Picaeta”, y todo ello, acompañado por papas, aceitunas o cacahuetes; (si se prefieren apostamos por riquísimos bocadillos de torraeta de anchoas o gambas). Algo especial y singular debe de tener este característico bar, que concita y se granjea desde su apertura en 1947, una necesidad de reunirse en él, para pasar algunos de los mejores momentos de ocio de nuestros vecinos.
Es un Bar con mayúsculas por su oferta, pero también, por lograr que uno se convierta en un asiduo cliente, y no falte a la cita diaria con Las Planas. Nos estamos refiriendo a la amabilidad y a la forma de ser de esta familia tan estimada, que, con la frescura del producto, su excelente forma de hacer, y su afabilidad y atención, consiguen convertirse en parte de nuestra familia.
Sois referentes en la zona portuaria de Castelló.
No nos olvidemos de probar sus exquisitos carajillos.